Vice...

miércoles, 16 de junio de 2010

 

He encontrado tras los minutos las esporas de la ausencia, es fácil girar tu rostro y hallarles posando en cada rincón, dando a lugar aquel pútrido hongo… infame vacio, ¿porque muestras tus raíces, en este, mi espacio?... dime que es aquello que buscas en mí…
Un tenue parpadeo, un ligero suspiro, no está allí, el aroma de aquella inerte soledad se ha ido, quizás mi entrecerrar de ojos abrió el espacio a mis sueños y por un segundo me ha mentido, vaya; es un alivio…
…Un brazo cruzaría mi cintura emanando aquella cálida serenidad que disolvió mis miedos. Eme aquí dibujando sobre mis labios la más sobria de las sonrisas. Sin preguntarlo mi cuerpo se gira buscándole, sin tardanza le encontraría, allí tan dulce y cándida en su reposo. Vaya que silencio, a su lado es tan escaso este particular estatus… solo se puede percibir la suave brisa que apenas escapa bajo la puerta, el perfume inexplicable de su abrazo y como evitar el arrullador tono de su respiración. Ya nuevamente perdido a merced, carente de voluntad mis ojos se cierran, que pesados parpados me han traído de regreso a estos pasares de arenas hipnóticas, me despido de la conciencia que suele a su compañía ser tan grata, pues ahora vago en mis propias mareas.
Aquí, donde solo conozco yo, mas no controlo demasiado, aquí aun habitan mis dudas y divagaciones, aquí donde mi cordura aun puede juzgar mis pasos que molesta estancia de mi mente, por un segundo las paredes se hicieron opacas, las ventanas cubiertas desde afuera nuevamente una perpetua penumbra y las voces de se hacían frágiles, tan tenues y apenas podía escucharles, ¡desesperantes! .
Las heladas paredes se derriten y nuevamente hallo un claro de luz, mis ojos se abren mientras mi frente rebosaba de sudor, como antes el perfume sutil y enamorado arranca las pesadillas de mi imaginación. Acariciaría su rostro aun dormitarte, robando de sus labios un pequeño beso, querría escapar aferrándome a ella para presumir un poco de calma antes de nuevamente ocultar mis orbes, no sin antes musitarle mi gratitud y el ultimo te amo de esta noche, esta vez quizás culpe a lluna, ¿quién mas antes de ella poseía las voces en mi mente?, ¿quien más a su llegada podría mantenerle celos?

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